- Ventajas de vivir en el extranjero
- Desventajas de vivir en el extranjero
- Cómo vivir en el extranjero
Vivir en el extranjero es una gran decisión y, como toda gran decisión, también requiere mucha planificación.
Y para que este sueño no muera en la playa, hemos enumerado a continuación los principales consejos e información que necesitas saber antes de hacer las maletas y mudarte a otro país, échale un vistazo:
Ventajas de vivir en el extranjero
Conocer nuevas culturas
Vivir en el extranjero es una experiencia enriquecedora desde el punto de vista sociocultural.
Entrar en contacto con personas y costumbres diferentes de lo que has conocido hasta ahora marcará una enorme diferencia en tu crecimiento personal y en tu forma de ver el mundo.
Mejorar el plan de estudios
La experiencia de vivir en el extranjero siempre está bien vista por los responsables de contratación de las empresas.
Esto significa que pasar un tiempo en otro país hará que su CV sea más interesante y atractivo, abriendo nuevas posibilidades de empleo e ingresos, ya sea al regresar a suelo brasileño o en otro país.
Madurez, responsabilidad e independencia
Es casi imposible pasar por la experiencia de vivir en otro país sin madurar, adquirir responsabilidad y una mayor independencia, tanto económica como emocional.
Esto es estupendo porque te hace darte cuenta de todo tu potencial y capacidad de superación.
Estas características surgen de cosas sencillas, como tener que lavarse la ropa o hacerse la comida, o incluso de cosas más complejas, como conseguir un trabajo o garantizar la fluidez en otro idioma.
Dominio de otras lenguas
Si te vas a vivir al extranjero, quieras o no, prácticamente te verás obligado a aprender un nuevo idioma.
Además del inglés, imprescindible en cualquier país que visite, también tendrá que aprender la lengua local.
Cuanto más tiempo permanezca en el extranjero, mayor será esta necesidad, sobre todo en países donde sólo se acepta la lengua local.
Viajar más lejos
Estar en cualquier país del mundo es prácticamente la certeza de poder viajar aún más y, en consecuencia, conocer más lugares.
Si la intención es vivir en Europa, por ejemplo, es posible visitar muchos países, primero porque tendrá paso libre entre ellos, segundo porque el coste es mucho menor que si saliera de Brasil.
Lo mismo ocurre con los países del continente africano o asiático, por ejemplo.
Desventajas de vivir en el extranjero
La nostalgia es inevitable
No serás la única persona que se muda al extranjero y echa de menos prácticamente todo: su familia, sus amigos, su ciudad, las tiendas a las que solía ir, etc.
La nostalgia golpeará fuerte, pero en estos momentos, la manera es mantener el control sobre las emociones y para aliviar un poco este dolor, hacer una videollamada con los padres, hermanos y amigos.
Choque cultural
Además de la nostalgia, vivir en el extranjero es el ejercicio diario de lidiar con una cultura completamente diferente a la nuestra aquí en Brasil.
Esta diferencia se nota en las cosas más pequeñas que antes formaban parte de su vida cotidiana y ahora, debido a una diferencia cultural, económica y social, ya no lo son.
Es el caso, por ejemplo, de saludar con un beso en la mejilla o reírse a carcajadas en una fiesta. Los países más conservadores, por ejemplo, no toleran este tipo de cosas.
También tendrá que aprender a lidiar con las muchas diferencias gastronómicas entre países de todo el mundo.
¿Sabes ese buffet completo a la hora de comer? ¡No existe en otros países! ¿Y el perrito caliente a là brasileira? ¡Tampoco!
Cambios de plan
Esté preparado para cambios repentinos de planes cuando viva en el extranjero.
Es natural y esperable que muchas cosas no salgan como uno espera, precisamente porque se trata de lugares, personas, situaciones y culturas muy diferentes.
Un buen consejo es intentar hacer planes a corto y medio plazo, y dejar los planes a largo plazo para cuando se haya asentado con más seguridad en el país extranjero.
Expectativas frente a realidad
La idea aquí es muy parecida a la anterior, y quizá ésta sea una de las mayores dificultades para quienes se van a vivir al extranjero.
La mayoría de las veces, la gente tiende a proyectar expectativas muy por encima de la media, imaginando que llegará al extranjero con el trabajo de sus sueños, viviendo en una de esas casas de película y ganando suficiente dinero para mantenerse a sí misma y a la familia que se quedó en Brasil.
Sin embargo, no siempre es así, por lo que es importante mantener objetivos realistas y no hacerse tantas ilusiones.
Al principio, las cosas pueden ser complicadas. Tendrás que adaptarte a un nuevo país, a una nueva cultura y a un nuevo idioma, además de tener que mantenerte con un trabajo que no siempre será el que tú consideres mejor. Así que ¡tómatelo con calma!
Cómo vivir en el extranjero
Ahora que ya conoces todas las ventajas e inconvenientes de vivir en el extranjero, es hora de saber cómo poner en práctica tu plan de vivir en el extranjero. Echa un vistazo a los consejos:
¿Qué piensa hacer ahí fuera?
¿Alguna vez se ha parado a pensar qué le motiva a irse a vivir al extranjero? ¿Es para trabajar? ¿Para estudiar? ¿Para tomarse un año sabático?
Cada una de estas posibilidades requerirá una planificación diferente. Para quienes deseen trabajar en el extranjero, primero es necesario obtener un visado de trabajo.
Permanecer ilegalmente en un país es arriesgado y podrían deportarte e impedirte regresar.
Además, los trabajadores ilegales pueden convertirse en mano de obra barata, casi esclava, ganando muy poco y sin leyes laborales que les protejan.
Por lo tanto, es esencial que conozca las leyes de inmigración del país en el que quiere vivir y cómo funciona el visado de trabajo.
Otro punto importante es el idioma: cuanto más fluido sea su idioma materno, más posibilidades tendrá de conseguir un buen trabajo.
Quienes tengan intención de vivir en el extranjero para estudiar deben, en primer lugar, conocer el idioma.
Si tu intención es sólo adquirir fluidez en el idioma, ve al país adecuado, es decir, para aprender italiano tienes que ir a Italia, para aprender inglés ve al Reino Unido o a Estados Unidos.
Pero si tu objetivo es hacer un curso en una zona concreta, conoce los programas de cada universidad, los requisitos legales y los costes de la estancia.
Esto es incluso muy importante para los visados de estudiante, ya que la mayoría de ellos sólo permiten 20 horas semanales de trabajo remunerado, lo que puede no ser suficiente para cubrir tus necesidades.
Por último, si tu intención es tomarte un año sabático, haz una planificación financiera antes de hacer las maletas y asegúrate de que en tu itinerario de viaje figuran algunas de las mejores experiencias. De ese modo, cuando regreses podrás ampliar (y mucho) tus posibilidades laborales y de ingresos.
Documentos en regla
Una vez que haya decidido en qué país vivir, empiece a buscar información sobre la documentación que necesita para este traslado.
Los documentos exigidos varían mucho de un país a otro, así que asegúrese de consultar los sitios web oficiales y el consulado del país.
Si tiene la posibilidad de solicitar la nacionalidad de algún país, también es recomendable que lo haga. Esto le abre puertas y agiliza los trámites burocráticos.
No olvide comprobar que las vacunas están al día.
Obtenga un visado y cuide su pasaporte
El visado y el pasaporte son una parte fundamental de los planes de cualquier persona que quiera vivir en el extranjero.
Pídalo pronto y espere: puede que lo reciba muy rápido, pero también puede que tarde un poco. Por si acaso, hágalo pronto.
Con el documento en la mano, no descuide ni un minuto su pasaporte. Perderlo puede darle un tremendo dolor de cabeza.
Planificación financiera
Hay innumerables cosas de las que preocuparse antes de irse a vivir al extranjero, pero ninguna de ellas es tan importante como la planificación financiera.
Definirá toda tu experiencia en el extranjero, por lo que es esencial que le prestes toda la atención posible.
Lo ideal es empezar a planificar con una antelación de entre seis meses y dos años.
Incluya en la planificación los gastos con alojamiento, alimentación, transporte, ocio (al fin y al cabo, nadie es de hierro), además de los gastos iniciales para salir de Brasil, como tasas de documentación, billete de avión, traslado del aeropuerto al hotel (si aún no ha contratado alojamiento), entre otros ítems que considere importantes.
Recuerda que la planificación debe hacerse en la moneda oficial del país en el que deseas vivir, para que no te lleves ningún susto al convertir.
Más información sobre el país en el que quiere vivir
Investiga y estudia las características del país en el que quieres vivir, no sólo la cultura, sino también los aspectos económicos, sociales, geográficos y climáticos.
El clima es muy importante, no todos los países del mundo son tan tropicales como el nuestro, así que conviene estar preparado para el frío y la nieve.
Aprender la lengua
No es necesario dominar otro idioma al salir de Brasil, pero es muy recomendable saber al menos lo básico para mantener la comunicación al mínimo.
Concéntrese en las expresiones y palabras más utilizadas en la vida cotidiana y asegúrese de que sabrá cómo comunicarse en situaciones cotidianas.
Con planificación y determinación verás que vivir en el extranjero no es tan difícil de conseguir.
Y para reforzar aún más tu entusiasmo, busca testimonios y perfiles de personas en las redes sociales que ya se hayan embarcado en esta aventura.
Te harás una buena idea de lo que es vivir en otro país.